Hasta luego Concha porque no podemos decirte adiós, te recordaremos en cada "vuelta y cruce" que demos; y entre el sonido de los bolillos, añoraremos tus risas y tus bromas.
Gracias por el ejemplo de entereza y fuerza que nos has dado durante todos estos años; hasta en tus peores momentos no has dejado de mover tus manos, de asistir a clase y de darnos ánimos.
Siempre estarás con nosotras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario